Ley de Servicios Digitales: para un entorno online seguro y responsable
Por primera vez, un conjunto común de normas sobre las obligaciones de los intermediarios y la rendición de cuentas en todo el mercado único abrirá nuevas oportunidades para prestar servicios digitales a través de las fronteras, garantizando al mismo tiempo un elevado nivel de protección a todos los usuarios, con independencia del lugar donde residan en la UE.
Información sobre la ley en la página de la Comisión Europea
Ley de Mercados Digitales: para unos mercados digitales justos y abiertos
Algunas grandes plataformas en línea actúan como «guardianes» en los mercados digitales. La Ley de Mercados Digitales tiene por objeto garantizar que estas plataformas se comporten de manera equitativa en línea. Junto con la Ley de Servicios Digitales, la Ley de Mercados Digitales es uno de los ejes de la estrategia digital europea.
Información sobre la ley en la página de la Comisión Europea
Nuevas normas para los usuarios online
La Ley de Servicios Digitales y la Ley de Mercados Digitales crean un espacio digital más seguro y más abierto para todos los usuarios, donde se protegen sus derechos fundamentales y donde tienen acceso a servicios digitales de calidad a precios más bajos.
Nuevas normas para las empresas online
La Ley de Servicios Digitales y la Ley de Mercados Digitales crean unas condiciones de competencia equitativas que permitirán a las empresas digitales innovadoras crecer dentro del mercado único y competir en todo el mundo.
Nuevas normas para las plataformas online
La Ley de Servicios Digitales y la Ley de Mercados Digitales establecen una elevada referencia mundial para regular los servicios digitales, con obligaciones claras adecuadas a la importancia de las plataformas online.
¿QUÉ ESTABLECE?
Obligaciones que deberán cumplir las empresas digitales, desde las más pequeñas hasta las más grandes.
Se han establecido hasta 4 niveles de responsabilidad diferentes. Lo que implica que no se exigira de igual manera a big techs como Google o Facebook que a pequeñas empresas.
Estas "grandes plataformas", o 'gatekeepers', son aquellas que cumplen una serie de requisitos, entre los que se encuentra alcanzar el 10% de los 450 millones de usuarios en Europa. Por el momento no hay un listado completo de compañías que entran en esta categoría, pero todos conocemos varias que claramente estarán nombradas.
Entre las medidas que establece la DSA, se encuentran obligaciones de transparencia con los algoritmos utilizados para las recomendaciones, auditorías externas, acceso a los datos de las grandes plataformas para investigación o la obligación de mantener un registro de los usuarios que venden online, para ayudar a identificar a aquellos que venden bienes ilegales.
Las grandes plataformas online tendrán requisitos específicos, desde explicar cómo funcionan sus algoritmos hasta compartir datos con investigadores para estudiar que no representan un daño a la sociedad.
Para las grandes empresas es donde se establece adicionalmente la DMA. Con ella se prohibirán prácticas como impedir que los usuarios desinstalen aplicaciones preinstaladas, se exigirán medidas de interoperabilidad y se impondrán sanciones de hasta el 10% del volumen de negocio mundial en caso de incumplir con algunas de las medidas adoptadas. Una multa superior al 6% de los ingresos globales totales que establece la DSA.
DEBATE POR UNA EUROPA ADAPTADA A LA ERA DIGITAL